Pinceladas con la Cultura… Presentación del libro “El Caballero Mexicano” autora: Carmen Gómez Aristu

“Algunas tardes asomaban las luciérnagas y comenzaban su danza, su baile de luces en el campo como si de un guateque o una disco se tratara; me podía quedar así horas observándolas maravillada. Eran sensaciones y vivencias absolutamente nuevas y desconocidas hasta aquel momento para mí y que nunca pude imaginar llegar a imaginar. Era llegar a un mundo nuevo, pero a la vez también se me hacía familiar, como si ya lo conociera.”

El caballero mexicano, un libro que narra la historia de amor de dos corazones unidos entre orillas por un inmenso océano en el que transcurren diez años de intensas vivencias.
Canarias y especialmente México, convertido en un gigantesco plató cinematográfico en el de descubres olores, colores sabores y sonidos que atraen la atención del lector y le sumerge en las vivencias experimentadas por su autora.
“en el transcurso del recorrido, puedes ver las vacas y los caballos pastando por las praderas y cerros, comiendo zacate; libres, como el aire fresco que los rodea. No pueden faltar los árboles, encinos, pinos, fresnos, sauces, robles y especies de huizache y granjenos, o también los famosos nopales mexicanos y biznagas, que lo representan fuera del territorio hacia el resto del mundo”
Fascinada por el paisaje se va adentrando en la historia de un pueblo con evidente influencia española.
“Tapalpa y su plaza hermosa, donde la rodean dos iglesias: una parroquia moderna y la otra más antigua o templo de San Antonio, que dicen que tiene en su historia más de 350 años”
En la medida que avanzas en la lectura vas sintiendo el olor de los campos el colorido de su paisaje, las costumbres de un pueblo con profundas raíces aztecas que lo hacen singular y extraordinario.
Estamos ante un libro biográfico de corte novelesco, en el que se describe con todo lujo de detalles no solo la belleza del paisaje, la historia de un pueblo o los acontecimientos acaecidos. Nos sumerge en las emociones, en el sentir de su corazón, en los detalles que iluminan su alma. Con un lenguaje sencillo, ágil y cuidado nos traslada de una orilla a otra del Atlántico con la misma intensidad que en las noches oscuras observaba el cielo adornado con millones de estrellas, desde su rancho de Tapalpa.
Carmen Gómez Aristu nos ofrece su obra prima con la ilusión de quién ha superado con asertividad y solvencia el luto por la pérdida de un hombre que llegó en un momento trascendente a su vida, con el que vivió una experiencia vital enriquecedora. Ahora desde el profundo agradecimiento y como tributo a su memoria nos lo ofrece con la convicción de quien sabe que el amor como la energía no se crea ni se destruye tan solo se transforma para continuar dando Luz al universo que todos llevamos dentro.


Carmen Gómez Aristu


Nacida en 1963 en Las Palmas de Gran Canaria.

De padre canario y madre navarra, creció muy feliz siendo la primogénita en una familia de cinco hermanos.

Madre de dos hijos, desafío al destino y se fue a México donde se centra principalmente esta autobiografía.

A lo largo de su vida desarrolla el gusto por el género literario, comenzando en el mundo de la poesía. Actualmente vive con pasión la inquietud de narrar y transmitir historias reales que acaricien el alma.

Se trata que un ser humano extraordinario que siente la vida como:

“Un regalo que se nos da. Es una oportunidad única, un reto. Es un soplo de aire fresco”.

En un acto primerizo me envolvieron las emociones; esas que inundan el ambiente, que te secan la garganta y te paran en seco, que te enjuagan la cara, sin perder una sonrisa.
Fue un gran día, un día muy especial para los dos. Por supuesto que hablo también de él, del caballero mexicano.

Me sentí rodeada de mucho amor y de amigos, que me ofrecieron desbocadamente su compañía y sus abrazos.

Alguno, incluso, me dedicó sus ojos limpios y una mirada, dónde no hacen falta las palabras.

Qué bonito es hacer equipo y compartir las vivencias.

Hasta México llegamos con el mariachi y el tequila.

¡Bendita vida! que hace de las suyas y nos une a todos, de la forma más acertada.