Hoy los bucios suenan a lamento y los tambores, a tristeza. Hoy 18 de junio de 2021 la Virgen de Guía se ha llevado con ella a uno de sus mayordomos. No era el más importante, porque todos lo son y sobre todo teniendo en cuenta que su trabajo consiste en mantener viva una promesa hecha por sus padres, abuelos o bisabuelos; pero sí era el organizador, el que recolocaba las emociones de todos para que esa promesa se convirtiera en un acto lleno de respeto, amor, honor y elegancia hacia la  Virgen de Guía.

No nos quedamos solos, pero en estos momentos sentimos una sensación de desamparo, de estar perdidos…recuperaremos la confianza. Y lo haremos en su honor porque así nos enseñó que debemos hacer. Con corazón, pero sin que se nuble la razón ni el sentido común.

Nuestra fiesta de Las Marías fue mejorando cada año y lo hizo gracias al trabajo de los mayordomos organizados por Luis Miguel. Han aprendido, pero discúlpennos por sentir que le vamos a echar mucho de menos.

Esta Asociación podría hablar mucho sobre él porque estaba por aquí mucho antes que nosotros. Estaba por aquí desde que en S. Roque se organizaban las fiestas infantiles en las que también tuvo mucho que ver, pero hemos preferido centrarnos en su labor altruista como mayordomo de la fiesta de Las Marías.

Ahora va a estar al lado de su Virgen. Ella se sentirá muy orgullosa de tenerlo consigo y entre los dos velarán porque todo siga como se ha hecho hasta ahora, que se siga haciendo muy bien, como siempre.

Disfruten de su mutua compañía y nosotros, solamente podremos decir “Descansa en paz, Luis Miguel”.