Para conmemorar el Día del Libro hemos elegido unos versos de Elsa López, escritora española nacida en Guinea Ecuatorial pero que posteriormente se mudó a la Isla de la Palma, pasando una temporada en Madrid. Ha obtenido diversos premios literarios y cuenta con una extensa obra poética, además de escribir narrativa y diversos guiones, sin olvidar las biografías de José Pérez Vidal y Diego Hidalgo.
En este día tan especial, 23 de abril, se encuentra en tierras chilenas, en concreto en Santiago de Chile. El próximo jueves será homenajeada por la Fundación Iberoamericana, pues se reúnen en su honor. Además visitará las Casas Museo de Pablo Neruda y de Vicente Huidobro, además de recibir el calor y cariño en varias tertulias  literaria donde ha sido leída y comentada. Feliz día del Libro a todos. Les dejamos con unos poemas de Elsa.
Hay dolores que se agrupan en el costado
Hay dolores que se agrupan de costado.
Hay dolores alegres de brillantes colores
que iluminan la casa y te inventan canciones.
Y hay dolores oscuros de incalculables formas
que se filtran de día en las aceras
y te impregnan de luto las alcobas.
El dolor que yo tengo tiene un nombre concreto.
Se llama como tú y a ti se te parece.
Tiene tus mismos rasgos, tus mismas cicatrices,
tu manera invencible de rasgarme la herida
y dejarme las tardes y el domingo perdidos.
 
Yo no quiero morirme sin saber de tu boca
Yo no quiero morirme sin saber de tu boca.
Yo no quiero morirme con el alma perpleja
sabiéndote distinto, perdido en otras playas.
Yo no quiero morirme con este desconsuelo
por el arco infinito de esa cúpula triste
donde habitan tus sueños al sol de mediodía.
Yo no quiero morirme sin haberte entregado
las doradas esferas de mi cuerpo,
la piel que me recubre, el temblor que me invade.
Yo no quiero morirme sin que me hayas amado.