Día Internacional de la Familia, el deber de los gobiernos

   Cada 15 de mayo y desde el año 1994, se conmemora El Día Internacional de la Familia, celebración relativamente reciente para una institución cultural que nos acompaña casi desde nuestros orígenes como especie humana y dado el gran valor que tiene como agente socializador y sostén del sistema social.

   Sabemos que es en la familia donde se reciben los primeros intercambios afectivos y se transmiten los valores y normas que imperan en una sociedad para así convertirnos en miembros de la misma.

   Hoy nos encontramos con un modelo de familia diverso ( familia nuclear, monoparental , homoparental , extensa, adoptiva…), esa pluralidad es un reflejo de los cambios en el sistema a los que sin lugar a dudas, la sociedad y los poderes políticos deben adaptarse.

   Cuando nombramos valores como respeto, tolerancia, igualdad, esfuerzo, trabajo, entre otros, y conceptos como educación, cuidados, afectividad, economía… estamos hablando de forma implícita de la familia pues es sobre ella sobre la que recaen esas responsabilidades de forma principal.

   Según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es el elemento natural, universal y fundamental de la sociedad, y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado, por eso es importante que se incluyan a la familias en los programas de gobierno de una forma seria y considerando los cambios y necesidades sociales a las que está estructura se ve expuesta. Hablamos de más y mejores medidas para facilitar la conciliación, la atención y cuidado de personas mayores y dependientes, promover la inclusión social, el crecimiento y desarrollo económico promoviendo el empleo y por lo tanto, una sociedad más equilibrada, puesto que la estabilidad de una familia facilita  desarrollarse bien.

 

                                           Alejandra Reyes Rodríguez. Psicóloga sanitaria.