El domingo, 22 de mayo de 1910, los socios del Apostolado de la Oración al Sagrado Corazón de Jesús (creado en la parroquia de Nuestra Señora del Pino por el párroco don Juan González a su llegada a Teror dos años antes) programó la recepción -en el lugar llamado “El Sifón” a la entrada del pueblo por El Hoyo- de la nueva imagen del Sagrado Corazón adquirida para sustituir a la primera que llegara a la Villa en 1880.
A las 7 de la mañana de aquel domingo, una comitiva de vecinos, socios del Apostolado, miembros de la corporación de entonces presidida por su alcalde don Manuel Acosta Sarmiento -padrino de la nueva imagen- llegaron a El Sifón y allí mismo se celebró la primera misa en honor al nuevo Sagrado Corazón, tras la que comenzó la procesión que lo trasladó al templo del Pino.
La primera celebración del Sagrado Corazón tuvo lugar a la Octava del Corpus, el viernes 3 de junio de aquel 1910, en el que desde las 7 de la mañana, don Adolfo Pérez Muñoz, obispo de la Diócesis, celebró misa y repartió comunión a “los niños de primera comunión, a los socios del Apostolado de la Oración y a todos los devotos del dulcísimo Corazón” como reseñara un cronista de entonces.
Su primera procesión por las calles terorenses tuvo lugar la tarde de aquel viernes, tras la cual y con el ritual de “las cinco visitas y la solemne reserva”, los Dávila de la Villa culminaron el día con la quema de varias piezas de fuegos artificiales.
Este año, Teror, fiel a tradición, fe y costumbre, repitió toda esta fiesta con la procesión por las calles de la Villa Mariana, dedicada a una advocación profundamente arraigada en los hombres y mujeres de aquí desde el último tercio del siglo XIX.
José Luis Yánez Rodríguez
Cronista Oficial de Teror