La Villa de Moya recibe el premio Ciudadano Europeo 2021 por la acogida a migrantes

  • El Parlamento Europeo distinguió hoy a los voluntarios y voluntarias del municipio norteño que se han volcado desinteresadamente en la atención, acogida e integración de las personas migrantes llegadas a Canarias en el último año, especialmente a los menores no acompañados que se encuentran en el albergue municipal de Corvo; el galardón, único concedido a una candidatura española y presentada por el eurodiputado Gabriel Mato, se entregará el próximo 9 de noviembre en Bruselas 

El Parlamento Europeo ha distinguido a los voluntarios y voluntarias de la Villa de Moya que atienden desinteresadamente a los migrantes acogidos en el municipio desde hace más de un año, con el premio Ciudadano Europeo 2021. Un reconocimiento a la solidaridad y a la labor de acogida e integración desempeñada por el pueblo moyense en su conjunto, tanto de manera anónima como amparada por el Ayuntamiento norteño, con las personas que han llegado en patera a Canarias. Y, en particular, con el medio centenar de menores no acompañados que se encuentran alojados en el albergue municipal de Corvo, cedido por el Consistorio para esta causa. Se trata de la única candidatura española premiada en esta ocasión, presentada por el eurodiputado canario Gabriel Mato, tras superar el proceso de selección de un jurado nacional y por la Cancillería, formada por cuatro vicepresidentes y dos expresidentes de la Eurocámara, entre otros integrantes.

“Estamos muy orgullosos de este reconocimiento al pueblo moyense, pues desde el primer momento nuestros vecinos se han volcado para atender de manera desinteresada a estas personas migrantes y han demostrado una solidaridad ejemplar”, expresó emocionado el alcalde de la Villa de Moya, Raúl Afonso. Quien subrayó que “es muy difícil expresar con palabras tanto agradecimiento y orgullo, como alcalde y como ciudadano, por la hospitalidad de nuestro municipio una vez más y por tantas muestras de apoyo que hemos recibido para intentar aliviar en la medida de lo posible la difícil situación de estos seres humanos que han pasado penurias indescriptibles”. Afonso concluyó que este premio “supone un reconocimiento a la bondad y a la humanidad que se antoja más necesaria que nunca para combatir cualquier brote de odio o rechazo, que no debemos de permitir bajo ningún concepto en nuestra sociedad”.

 

Este galardón reconoce a personas u organizaciones excepcionales que luchen por los valores europeos, promuevan la integración entre ciudadanos y los Estados miembros o que faciliten la cooperación trasnacional en el seno de la Unión Europea, así como a quienes promuevan los valores de la Carta de los Derechos Fundamentales. La candidatura moyense fue presentada en el mes de abril por el eurodiputado Gabriel Mato “empujado por el comportamiento ejemplar de unas personas que son el mejor reflejo del gran papel que una parte de la sociedad canaria ha desempeñado durante la crisis migratoria más grave que ha experimentado nuestro Archipiélago desde 2006”, explicó. Asimismo, Mato expresó que este premio “reconoce el comportamiento comprensivo, empático y solidario de los voluntarios de la Villa de Moya, quienes lejos de cualquier brote xenófobo se han convertido en un ejemplo de hospitalidad”. En este sentido, el eurodiputado concluyó que “es un día en el que todos los canarios debemos sentirnos muy orgullosos de que las instituciones europeas hayan puesto en valor todo lo que estas personas han hecho por ayudar a quienes lo han perdido todo”.

El medio centenar de jóvenes migrantes subsaharianos no acompañados acogidos en el albergue municipal de la Villa de Moya, situado en Corvo, están completamente integrados y conviven en armonía en el municipio norteño. Donde, por las mañanas reciben clases de español e inglés, talleres y acciones formativas y, por las tardes, disfrutan de apasionados partidos de fútbol en el campo de Fontanales; siempre cumpliendo las más rigurosas medidas sanitarias establecidas para contener la pandemia de COVID-19 y bajo la supervisión de la entidad gestora del centro, dependiente del Gobierno de Canarias. Además, las gestiones realizadas por el Ayuntamiento tras la cesión de las instalaciones al Ejecutivo regional para esta atención humanitaria, han supuesto la creación de más de una docena de puestos de trabajo para vecinos del municipio y un volumen de negocio importante para los comercios locales. Pues los alimentos y productos básicos para el cuidado de los chicos se adquieren en los establecimientos y a través de los productores, agricultores y ganaderos moyenses.

Estas gestiones también han permitido la escolarización de varios de los menores en centros de la Villa y la concesión de plazas en las Escuelas Artísticas Municipales para aquellos que han mostrado interés por la formación artística, sobre todo, musical. Si bien la empatía del municipio norteño con el continente vecino se remonta a muchos años atrás y con acciones solidarias de diferente índole. No en vano, en otras ocasiones el Ayuntamiento ya ha dedicado eventos a África, como el foro interdisciplinar por la igualdad de las mujeres rurales SURCA Villa de Moya, en el que han participado mujeres de Gambia o Senegal, o más recientemente con la programación del Moya Espacio de Culturas, MEC África, que incluyó talleres, exposiciones, proyecciones cinematográficas e iniciativas de intercambio cultural y conocimiento entre los migrantes y los vecinos moyenses.

Representantes de los voluntarios y voluntarias de la Villa de Moya recibirán este galardón el próximo 9 de noviembre en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas, si así lo permiten entonces las condiciones sanitarias a causa de la pandemia de COVID-19. Es la segunda candidatura presentada por el eurodiputado Gabriel Mato en su trayectoria que obtiene el premio Ciudadano Europeo, pues ya en 2014 impulsó la concesión de este reconocimiento a la Orden Hospitalaria de San Juan se Dios, por la dimensión social de su labor ligada a los valores consagrados en la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE y, en especial, a la ayuda social. Una institución formada por más de un millar de hermanos y que cuenta con más de 50.000 colaboradores presentes en los cinco continentes. En el caso de la Villa de Moya, han sido muchas otras las administraciones de ámbito local, insular y regional que también han destacado la ejemplaridad del municipio y del Ayuntamiento moyense en la acogida a los migrantes.