Algo en tus movimientos que me atrapa al mirarte y en tu sonrisa, el placer de mis mejores amantes.
Algo perdido hallé en tu manera de besarme ya creo, ¡y de que manera! que no podré dejar de amarte.
Algo, que a puntadas cose heridas en el entresijo de sueños delirantes dónde enloquece la sin razón y aunque duela, no quiero otro amante.
Y es que solo al pensarte mi alma y mi cuerpo desbocan insaciables desbordando un volcán que a erupción va irremediable.
No me preguntes si en la eternidad dejaría de amarte solo sé, que hasta el infinito moriría si de mí, tú te alejases. |