Rebuscando en todo el material que tenemos de Guía nos encontramos con la iniciativa que allá por el 2007, tuvo alguien que quiere bastante a este pueblo como Antonio Aguiar, proponiendo «Salvar la Bodega», para que su esencia siguiera otorgando su halo identitario a Guía.
A partir de esa iniciativa mi primo Sergio Aguiar elaboró un documento bastante completo sobre el origen y evolución de la Bodega que nos aporta luz sobre lo que tenía de importante el local, su contenido.
Por desgracia la ya visible falta de tacto y sensibilidad de la actual corporación, siendo propietaria del local, lo ha reducido a la nada, ofreciéndonos según el proyecto un sucedáneo moderno «adaptado» a la modernidad.
Alguien no comprende que los conceptos de identidad y patrimonio se sustentan en la intimidad del concepto de pertenencia a un grupo y en el apropiamiento de la historia como propia.
Cuando se comete un atentado al patrimonio y a la historia como ha sido la destrucción de La Bodega de Chago, no sólo se vacía el poso patrimonial de un pueblo y una isla, sino se hace algo quizás más grave: Se le niega a nuestros hijos e hijas el ser participes de su historia y patrimonio, se les arranca sin piedad la posibilidad de compartir la historia de sus padres y abuelos… y eso en nuestra sociedad y en nuestro tiempo es simplemente una aberración.
Vale la pena leer la documentación que sigue.
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