Ben Magec-Ecologistas en Acción exige la paralización efectiva y definitiva de las obras del hotel en la Tejita y la restitución de los terrenos a su estado original

Para la federación Ben Magec-Ecologistas en Acción, la orden de paralización cautelar publicada el lunes por el Ministerio para la Transición Ecológica de las obras del hotel de lujo construido con indicios de múltiples irregularidades en la Playa de la Tejita, es un paso importante aunque insuficiente y tardío. Dicha resolución pone de manifiesto que las obras de la empresa constructora del hotel «podrían resultar afectados por la servidumbre de protección una vez finalice el procedimiento de deslinde del tramo de costa donde se encuentra la playa de La Tejita” según afirma el MITECO en su comunicado.

La Asociación Ecologista Salvar La Tejita y Asociación Tinerfeña de Amigos de la Naturaleza (ATAN) solicitaron el 5 de marzo de 2018 a la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar una revisión de deslinde en el tramo de costa de unos cuatrocientos ochenta y cinco metros y presentaron un informe sobre geomorfología y morfodinámica del sureste de Tenerife con especial atención al área Tejita-Chinchorro en el que demuestran la presencia de bienes susceptibles de ser incluidos en el Dominio Público Marítimo Terrestre (DMPT) en el interior de la parcela clasificada como “suelo urbano turístico”.

Ocho meses después, la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar autorizó al Servicio Provincial de Costas en Tenerife la apertura del expediente de revisión en este tramo de costa, dando el visto bueno a los argumentos aportados por estas asociaciones para la revisión de deslinde. El trazado del deslinde provisional que propone Costas-Madrid se ajusta plenamente con la propuesta ecologista que, con la nueva delimitación del Dominio Público Marítimo Terrestre y la servidumbre de protección ampliada a 100 m, afectaría al 85 % de la superficie de la parcela donde la promotora ha comenzado la construcción de su proyecto. 

Según el artículo 12.5 de la Ley Costas/1988 la apertura de este expediente debía implicar “la suspensión del otorgamiento de concesiones y autorizaciones en el dominio público marítimo-terrestre y en su zona de servidumbre de protección” por lo que desde Ben Magec-Ecologistas en Acción no entendemos la tardía respuesta de la administraciones en proceder a la paralización.

La urbanización de la Tejita es un cúmulo de despropósitos. Desde la declaración de la playa como suelo urbanizable por el ayuntamiento de Granadilla de Abona, a la concesión de una licencia de construcción en 2018, fuera de plazo y casualmente solo días antes de recibir la comunicación de la apertura del expediente del deslinde del dominio público que hubiera supuesto no haberla podido conceder. Además, la Asociación Salvar la Tejita y ATAN ya demostraron en su estudio que no puede ser suelo urbanizable, como afirman el consistorio sureño y la promotora, puesto que no ha sido acondicionado como urbano en tiempo y forma, razón por la que debe volver a ser calificado como rústico.

El espacio está afectado además, por una Zona de Especial Protección para las Aves por lo que su construcción tendría un enorme impacto ambiental también sobre la Reserva Natural Especial de Montaña Roja. Así mismo, hay pruebas evidentes de que las obras están interrumpiendo la dinámica dunar que aporta la arena que configuran las playas de la Tejita y el Chinchorro.

 

Más allá del proceso legal y las implicaciones ambientales, las ecologistas mostramos nuestra alarma por las presiones y violencia ejercida por la empresa promotora hacia las dos activistas que, ante la inacción de la administración, están instaladas en lo alto de las dos grúas de las obras del hotel desde el pasado martes 16 de junio, con el objetivo de paralizar definitivamente la construcción, acción directa sin la cual no se habría agilizado la resolución del MITECO.

Nos preocupa enormemente la situación de las activistas, quienes han manifestado que no tienen intención de bajar hasta la paralización real de la obras. Manifestamos nuestro total apoyo y agradecimiento a estas personas y a los colectivos que las están acompañando y cuidando, y exigimos que se tomen las medidas oportunas para garantizar su salud, su integridad física, así como el respeto a sus derechos fundamentales. 

A pesar de la resolución del MITECO el Ayuntamiento de Granadilla de Abona en un comunicado público emitido ayer martes declaraba que “el Miteco no ha comunicado todavía al Ayuntamiento la paralización cautelar de las obras del hotel en la urbanización Costabella”. Actualmente las obras siguen en proceso y sus trabajadores, cumpliendo órdenes, han perforado en la base de las grúas ocupadas por las activistas e instalado un vallado, generando ansiedad en ellas, y poniendo en riego la estabilidad de los terrenos y la consiguiente asistencia de los bomberos mediante camiones-grúa.

La federación ecologista y su confederación Ecologistas en Acción están dispuestas a llegar hasta el final en el proceso hasta la restauración total de la zona. Hay que recordar que la movilización contra la urbanización de La Tejita se remonta a los años 80, y a pesar de ello se ha producido un gran desarrollo, en buena parte promovido por el mismo grupo constructor de este hotel. Desde entonces, las movilizaciones ciudadanas, aunque intermitentes, no han cesado, y Salvar la Tejita y ATAN lograron en 2019 paralizar el proyecto, recoger más de 100.000 firmas y que el conflicto llegase hasta el Parlamento Europeo que ha abierto un expediente a España. Estas irregularidades han tenido eco también en la prensa internacional de países como Reino Unido, Alemania y Francia.

Las recientes movilizaciones en apoyo a las activistas encaramadas en la grúas es una prueba más del abrumador rechazo de la sociedad civil de Canarias a la destrucción de su territorio, y tal como sucedió con la paralización del macromuelle de Agaete, que la ciudadanía canaria es firme frente al modelo basado en la especulación y la corrupción.

Por todo ello, desde Ben Magec-Ecologistas en Acción, reclamamos la ejecución inmediata de la paralización ordenada por el MITECO, la demolición de la obra y restauración de los terrenos. Exigimos una moratoria urbanística para Canarias que sólo permita la rehabilitación de lo ya construido que sea legal, así como la vinculación de las inversiones a los sectores económico que promuevan la diversificación de la economía de las islas, priorizando el cuidado de las personas y del territorio, como el desarrollo del sector primario o la custodia del territorio. Jugar nuestro futuro a una sola carta en plena emergencia climática y ecológica es un suicidio, y nuestros políticos deben tener el valor de obrar con la determinación necesaria para velar por el bienestar y supervivencia de la población canaria, optando por un modelo que aporte mayor resiliencia de las costas canarias y del territorio en su conjunto, la mejora de la calidad democrática y en definitiva, el bienestar a la ciudadanía.