- El alcalde, Raúl Afonso, se reunió en la mañana de hoy con el consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, a quien trasladó la posición del Consistorio norteño ante la negativa del Cabildo de Gran Canaria de incluir los túneles en las correcciones del documento de PTP-15 remitido al Ejecutivo regional para la emisión de un nuevo informe
- La postura del Ayuntamiento moyense está avalada por los vecinos y la totalidad de la Corporación municipal, donde se han aprobado por unanimidad en pleno todos los documentos en defensa de los túneles; la propuesta del Cabildo grancanario condena el desarrollo económico y social de la franja costera del municipio
El alcalde de la Villa de Moya, Raúl Afonso, reiteró en la reunión mantenida hoy con el consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, la firmeza del Ayuntamiento norteño en la defensa de los túneles en el macizo de Los Blanquizales, como única solución al trazado de la GC-2 a su paso por la costa moyense. Alternativa que el Cabildo de Gran Canaria sigue sin incluir en las correcciones del documento del Plan Territorial Parcial del Litoral del Norte: Arucas-Moya-Santa María de Guía (PTP-15), remitido por la Consejería insular de Política Territorial y Paisaje al Ejecutivo regional para la emisión de un nuevo informe. Este proyecto planteado por la Corporación grancanaria mantiene para esta carretera un Vial de Alta Capacidad o variante del actual trazado entre Bañaderos, en el municipio de Arucas, y El Pagador, en Moya, pese a que la opción de los túneles defendida por el Consistorio moyense fue valorada positivamente por los técnicos del Cabildo en el año 2014.
La postura del Ayuntamiento de la Villa de Moya está avalada por los vecinos de la zona y por la totalidad de la Corporación, donde se han aprobado por unanimidad en Pleno todos los documentos que se han ido presentando desde hace varias décadas a favor de los túneles. Por ello, el máximo edil norteño, Raúl Afonso, aseveró que “no permitiremos el atropello y la condena al desarrollo económico y social de la franja costera de nuestro municipio que supondría el actual proyecto” del Cabildo de Gran Canaria. Afonso subrayó que “hemos ido desmontando con datos e informes todos los argumentos presentados por la Corporación insular para mantenerse en esa posición incomprensiblemente inamovible” y aseguró que “no queremos perjudicar a Santa María de Guía ni a Arucas, pero tampoco vamos a permitir que nos borren del mapa y que nuestro municipio sea tratado de manera injusta y como un simple lugar de paso”. En este sentido, Afonso concluyó que “llegaremos hasta donde sea necesario para defender a la Villa de Moya”.
Vial de Alta Capacidad o variante del trazado de la GC2 Bañaderos-El Pagador
Tal y como han analizado los técnicos municipales del Ayuntamiento de la Villa de Moya, el proyecto de ejecución de un Vial de Alta Capacidad (VAC) o variante del trazado de la GC2 presenta graves contradicciones, similares a las alternativas que ya anuló el Tribunal Supremo en 2009 y 2011. Si bien entre los objetivos generales que plantea el PTP-15 se resalta el alejar el tráfico de las viviendas de la zona por motivos de seguridad y paliar el efecto barrera que ejerce el actual trazado entre los núcleos aruquenses de Bañaderos y El Puertillo, estas premisas no quedan reflejadas en la vía que discurriría por el término municipal de Moya. Donde el ramal propuesto quedaría a menos de ocho metros de algunas casas y a menos de treinta metros de otras edificaciones, generando una sobrepresión en los núcleos urbanos del litoral que incumple la Ley de Carreteras de Canarias, que establece el límite de distancia entre vías y viviendas en treinta metros.
Además, el trazado ideado para la nueva carretera, al transcurrir por una franja muy estrecha del territorio costero, dejaría a su paso por el litoral de la Villa de Moya un paisaje plagado de bancales o muros de hormigón para la contención de los cuatro nuevos carriles con los que contaría la vía, dos en dirección a Las Palmas de Gran Canaria y dos en dirección Norte, a los que se añadiría los otros cuatro existentes en la actualidad. Y erradicaría cualquier posibilidad de que el Ayuntamiento realice actuaciones de regeneración paisajística y medioambiental o creación de oportunidades económicas sostenibles y de ocio en esta zona, desde espacios verdes hasta usos terciarios para uso y disfrute del conjunto de la ciudadanía. Sin embargo, los túneles que defiende el Consistorio permitirían cumplir con los objetivos previstos en el Plan Insular y el propio PTP-15, alejando además las vías de los límites del Parque Rural de Doramas y de los riscos del macizo de Los Blanquizales, donde habitan y anidan importantes colonias de aves protegidas como la pardela cenicienta.
