Agentes de la Guardia Civil de los Puestos Principales de Agüimes y Vecindario, en Gran Canaria, apoyados por agentes de la Policía Local de Ingenio, intervinieron anoche en un dispositivo policial motivado por una persona que tuvo que ser trasladada de manera involuntaria – o forzosa según dictamen médico- a la unidad de Psiquiatría del Hospital Insular de Las Palmas de Gran Canaria.
Aviso
El Centro de Coordinación de Servicios (COS) de la Guardia Civil alertó en torno a las 03:20 horas de hoy a una patrulla de la Guardia Civil del Puesto Principal de Agüimes sobre una persona, en el barrio de Montaña los Vélez del municipio referido, que se encontraba inconsciente en la vía pública.
Al llegar al lugar descrito por el aviso no vieron a nadie, sin embargo los agentes fueron interpelados por un varón -de nacionalidad española y unos 40 años de edad- desde la azota de una casa terrera contigua, que se encontraba bajo los efectos evidentes de algún tipo de sustancia psicotrópica y que relató a los agentes una serie de hechos completamente incoherentes, manifestando incluso que iba a cometer un hecho grave contra uno de sus vecinos a no ser que lo detuvieran.
Solicitud de una ambulancia y de otros apoyos policiales
Debido al estado que presentaba esa persona los agentes solicitaron la presencia de recursos sanitarios, sin embargo cuando llegan los recursos sanitarios el varón en cuestión, que había abierto la puerta de su domicilio a sus agentes, mostró una actitud más nerviosa, llegando incluso a esgrimir un cuchillo de cocina contra uno de ellos, aunque depuso su actitud ante la rápida medicación de los agentes de la Guardia Civil, que solicitaron a su vez apoyo de otros recursos policiales, acudiendo al lugar unidades de la Policía Local de Ingenio y del Puesto Principal de Vecindario.
Además los recursos sanitarios afirmaron a los agentes de la Guardia Civil presentes que dada la situación llamarían a una ambulancia medicalizada y valorar la posibilidad del traslado de esa persona a un centro hospitalario.
Empleo de la fuerza mínima necesaria y traslado al Hospital
Sin embargo en el transcurso del tiempo en que llegaba la mencionada ambulancia y otros efectivos policiales, el varón referido mostró nuevamente un evidente estado de nerviosismo y posterior agresisvidad.
Fue en el momento en que llegaron los nuevos recursos sanitarios de la ambulancia medicalizada, y de otros agentes de la Policía Local, cuando dicho varón esgrimió de repente un puñal de grandes dimensiones con el que acometió a los agentes y les amenazó de muerte, debiendo éstos salir del domicilio en un primer momento ya que no podían mantener la distancia mínima de seguridad para evitar una posible agresión con arma blanca, momento en que el varón cerró la puerta de su vivienda.
Valorando la situación y al comprobar que en dicho domicilio convivían más personas que pudiesen correr un peligro físico, además de que el facultativo de guardia refirió a los agentes el traslado urgente del citado varón al área de psiquiatría del Hospital Insular, los agentes intentaron nuevamente acceder a la casa, logrando con la intermediación de otros familiares que se abriera la puerta del domicilio.
Sin embargo alertaron a los agentes que el varón en cuestión se había encerrado en un cuarto o habitación que había en la azotea, donde el citado guardaba otras armas blancas como un sable tipo katana, por lo que los agentes tuvieron que derribar la puerta para reducir, empleando la fuerza física mínima necesaria, al varón en cuestión que finalmente, en torno a las 06:15 horas, fue finalmente trasladado a la citada unidad de psiquiatría del Hospital Insular de Las Palmas de Gran Canaria.