No ha sorprendido la respuesta de la multinacional REE este domingo en diversos medios locales, volviendo a faltar a la verdad de su proyecto de central Hidroeléctrica de Bombeo Reversible Chira Soria. El argumentario con el que responde a las últimas publicaciones y acciones de denuncias contra este macroproyecto, utiliza datos que contradicen los recogidos en los documentos técnicos de la propia empresa.
REE señala que los vertidos de escombros se van a destinar a regenerar zonas degradadas. Sin embargo, la empresa pretende dejar dentro del espacio natural Parque Rural del Nublo, junto a la Presa de Chira, un mar de escombros de 140.000 metros cúbicos según reza la última versión de datos del proyecto (Modificado II), una zona protegida que lo tiene explícitamente prohibido.
El proyecto de obra afecta a cuatro áreas recogidas en la RED Natura 2000, que presenta distintas figuras de protección siendo uno de las más afectadas el Parque Rural del Nublo, en la zona de cabecera donde se sitúan las presas, y donde se quiere instalar la central de cavernas, edificios de plataformas, parques de maquinarias, chimeneas de equilibrio, circuito hidráulico, y nuevas carreteras como Chira Norte. Todo en una escala de gigantismo propia de otras épocas y donde la transformación y afección ambiental y paisajista de lugares tan emblemáticos como el Lomo de la Palma, Llano del Corral o los entornos de las presas será alterado de manera irreversible.
En este último capítulo, el de las pistas y carreteras REE alega que apenas serán unos tres kilómetros. Sin embargo, en el proyecto de ejecución está previsto construir más de 16 kilómetros de vías nuevas, para accesos a las torres del tendido de evacuación, a los edificios, circuito hidráulico, plataformas… algunas de esas nuevas pistas se van a ejecutar dentro de zonas de máxima pendiente y con importantes valores ambientales reconocidos y protegidos por la Red Natura 2000.
El desprecio a la legalidad vigente es manifiesto en los incumplimientos al Decreto 41/2010 que da encaje jurídico a la central, y que el actual proyecto supera en su zonificación. Tampoco cumple con las determinaciones del Plan Territorial de Transporte y Corredores Eléctricos PTE31, ya que mantiene en esta última versión la apuesta por llevar a cielo abierto casi el 90% de la red de Alta Tensión, cruzando dos veces el barranco de Arguineguín con torres que superan los 75 metros de alto.
Por todo esto la federación canaria ecologista confirma su rechazo a la construcción de la central y mantiene su postura histórica de cuidado y protección de los recursos naturales de Gran Canaria junto con la defensa de que los intereses generales estén al servicio de la mayoría social y enfocados a mejorar la calidad de vida de los habitantes de ahora y del futuro.
Por tanto, solicitan al Gobierno de Canarias, responsable de la Declaración de Impacto Ambiental que ponga freno a este disparate y mantenga la obligación de cumplir y hacer cumplir la ley. E insta a REE a que cese su campaña de falsear y minimizar los irrecuperables daños que causará en nuestra isla la central Hidroeléctrica de Bombeo Reversible Chira Soria, contra la que continúan movilizados con la única fuerza del bien común.