Juncalillo para mí ha sido y sigue siendo mi pueblo, donde me crie, donde me he realizado como persona y donde sigo viviendo aún y espero que continúe el resto de mi vida.

A dónde quiera que voy, llevo por bandera el pueblo que me vio nacer, junto a sus gentes, sus costumbres y su historia.

Para mi Juncalillo es vida, es paz, sosiego y en algunos momentos fiesta y jolgorio.

Por eso y tan sólo cuando tenía 17 años, comencé a colaborar con Doña Rosa Antonia Henríquez, en la realización de las fiestas del barrio.

Ella fue mi mejor profesora y por ello me resultó algo más fácil tomar las riendas tanto de las fiestas como de la Asociación de Vecinos.

Pasado unos años y en el 2004 y cuando tan sólo tenía 24 años, fue ya cuando decidí ser el presidente de la comisión de fiestas y de la Asociación de Vecinos Imidagüen, siendo en ese entonces uno de los presidentes vecinales más jóvenes de la isla.

Dentro de la Asociación de vecinos, siempre he intentado, juntos a mis compañeros, lograr mejoras necesarias para nuestro pueblo, de las cuales personalmente estoy muy satisfecho, como por ejemplo arreglos de caminos, asfaltado de vías, mejoras y arreglo de la carretera del Tablado, embellecimiento del entorno de la plaza e iglesia, construcción de nuevos baños públicos, cubierta del escenario de la plaza de Juncalillo, nuevos puntos de luz eléctrica y solar, la creación y mejora de varios parques en el pueblo… (como el parque de la Rama, el Automovilismo y Plazoleta del Tablado, así como arreglos de los dos locales vecinales). Por mi parte, he dejado en manos de mis compañeros, obras a punto de comenzar como nuevo alumbrado público, arreglos de farolas fotovoltaicas, arreglo y mejoras de caminos y asfaltado de algunas vías.

Desde esta Asociación, siempre se ha intentado hacer muchísimo más de lo que se ha hecho, pero evidentemente tampoco depende íntegramente de nosotros, sino de factores externos, de trabas burocráticas que se alargan en el tiempo, de la colaboración o no de algunas instituciones y un largo etcétera, que dificultan que muchas obras se lleven a cabo.

Por otro lado y referente a nuestras fiestas, si en mis inicios era complicado, en estos últimos años como presidente la situación se ha hecho mucho más compleja.

Prácticamente es finalizar las fiestas de un año e ir organizando las del siguiente.

Es un trabajo muy arduo y sacrificado… permisos y papeleos, reuniones, búsqueda económica y de patrocinadores, rifas y venta de números, confección del programa, publicidad audiovisual y pega de carteles por toda la isla, contrataciones, organización de los actos, recorrerme prácticamente todo el pueblo…. (desde el Tablado hasta Barranco Hondo de abajo), pidiendo la colaboración monetaria de los vecinos y vecinas y un sinfín de tareas.

Todo esto ha supuesto que las Fiestas de Juncalillo, sea conocida prácticamente en toda nuestra isla.

Personalmente, entre todos y cada uno de los actos que he podido organizar, uno que para mí ha sido muy emotivo ha sido el CENTENARIO DE LA RAMA DE JUNCALILLO, en honor a Santo Domingo de Guzmán, en el que se pudo inaugurar también el parque de la Rama.

Por otro lado, JUNCALILLO RESISTE, que fue una fiesta organizada a finales del mes de septiembre, como continuación de los actos que quedaron suspendidos, por el incendio del 2019, siendo un gran éxito de participación y asistencia de público.

Pero como todo en esta vida… tiene un principio y un final, creo que es momento desvincularme de mis tareas y de dar por terminado mi etapa en esta andadura como presidente de la Asociación y Comisión de Fiestas y dar paso a otras personas que seguirán a buen seguro, luchando por nuestro pueblo, nuestras fiestas y nuestros vecinos y vecinas.

Por tanto, me despido de todos con el orgullo de haberme rodeado de muchas personas que me han apoyado y querido, esperando que la nueva directiva y comisión de fiestas tenga muchísima suerte en esta nueva andadura, para que sigan teniendo siempre a Juncalillo en el lugar que se merece.

Sin antes despedirme, no quisiera dejar de agradecer a todos los Juncalillenses por su apoyo moral y económico y a todas esas personas, al Excmo. Ayuntamiento de Gáldar, al Cabildo de Gran Canaria, a empresas, grupos e instituciones que, de un modo u otro, han aportado su granito de arena para que nuestras fiestas hayan sido una realidad y también por su puesto a D. José Melián, (más conocido como Pepe el de la Iglesia) y nuestra querida Dña. María Teresa Cubas Luján, (conocida como Mary la de la tienda), por su colaboración altruista y desinteresada con nuestras fiestas.

A los que me han querido muchísimas gracias, y a los que no, decirles que siempre y todo lo que hice fue con mejor intensión y ganas de mejorar nuestro pueblo. Por lo menos lo he intentado.