El Ayuntamiento de Gáldar procederá a partir del miércoles a la estabilización de una vivienda abandonada en Juncalillo que quedó parcialmente derrumbada el pasado 19 de enero tras varios días seguidos de lluvia y que ha provocado cortes de tráfico desde entonces en la carretera insular GC-220. El Consistorio galdense, después de haber realizado los trámites legales pertinentes y notificar a los propietarios de la casa, que es de propiedad privada, ejecutará los trabajos de forma subsidiaria en esta vivienda, que está protegida en el catálogo municipal.
Así, el miércoles comenzará la estabilización y los trabajos se desarrollarán de la manera más rápida posible con el objetivo de reabrir la circulación de vehículos cuanto antes. Las lluvias caídas esa semana en los Altos de Gáldar dejaron más de 70 litros por metro cuadrado y causaron el derribo parcial de esta vivienda deshabitada desde hace muchos años a la entrada de Juncalillo provocando la caída de cascotes en la orilla de la calzada.
El peligro de desplome ha mantenido este tramo de vía insular cortado y el Ayuntamiento galdense ha agilizado al máximo los trámites y los plazos para poder ejecutar la estabilización de manera subsidiaria y recuperar la normalidad en dicha carretera lo antes posible.