LA POLVORA MOJADA DE HAALAND CONTRA LA SELECCIÓN ESPAÑOLA.

                Todavía colea ese verano que nos dieron la lata, sí, la lata; con las posibles incorporaciones de Haaland o Mbappé al Real Madrid, para que luego quedara todo en aguas de borrajas al no poder competir con el dinero saudí que contamina el fútbol actual. Parecía que los diarios deportivos nos estaban obligando a posicionarnos por nuestras preferencias. Yo, la verdad, como madridista confeso, me daba igual uno que otro. Al final, ninguno. Con lo que el madridismo pasó de la ilusión a la sensación de despecho. Yo no, aclaro, porque no me gusta sentir sensaciones negativas que me hagan viejo antes de tiempo, pero hay un cierto resquemor que hace que a los aficionados les esté gustando que a estos dos jugadores no les salgan las cosas bien. Ya digo, cosas del despecho.

                Eso sí, me alegré, viendo el partido de ayer y de cómo nuestra selección abrumó a la noruega sellando el pase a la fase final de la Eurocopa 2024, de que Haaland hiciera uno de los partidos más horribles de su vida. Es que no tiró ni a puerta. Reconozco que los dos jugadores mencionados dan miedo. Pueden hacer gol en cualquier jugada perdida. Que gusto sería poder verlos en la liga española alguna vez. Pero claro, como he escrito varias veces, desde que el fútbol dejó de ser un deporte para convertirse en un negocio, todo vale. Y el dinero es un poderoso compañero de viaje. Yo hago autostop a ver si algún día me recoge, pero nada, siempre pasa sin; ni siquiera, saludarme.


JUGADORES DEL LEVANTE PORTAN UNA CAMISETA DE LA LUCHA CONTRA EL CÁNCER.

                Me encantan estas acciones solidarias. Esas que nos hacen grandes a todos. En este caso, mi admiración al Levante Unión Deportiva por la iniciativa de lucir en sus camisetas las señales de una mastectomía para poner se granito de arena en la lucha contra el cáncer. Hoy en su partido contra el Racing de Ferrol de la jornada 11 de la Liga Hypermotion TV saldrán con el dibujo en el pecho de una mama en la parte derecha del pecho y una cicatriz en la parte izquierda.

                Más de estas cosas debemos ver en los campos de fútbol. No nos olvidemos de toda la influencia que este deporte genera en el público y, sobre todo, en los jóvenes a los que tenemos el deber de enseñar el camino de la solidaridad. No sé cómo va el partido, porque todavía están jugando, pero creo que este partido lo ganamos todos. Gracias Levante U.D.


MÁS DE 8.000 MIGRANTES LLEGAN A LAS COSTAS CANARIAS EN LO QUE VA DE MES.

                Esto es un drama. Más bien, un dramón. Lo miren como lo miren. Y lo peor, es que no tenemos culpa, aunque suframos las consecuencias. Bueno, ¿no tenemos culpa? En cierta forma, nosotros no los llamamos, vienen ellos; ¿qué podemos hacer? No somos parte del problema, pero tenemos que ser parte de la solución. No nos queda otra. A mí se me asemeja a cuando tu vecina de arriba se le inunda la casa y te empieza a llover dentro de tu salón. Tú no has pedido que la vecina deje los grifos abiertos, pero el que tiene el salón inundado eres tú. Y tienes que solucionarlo. Vale que los seguros se harán cargo de ello, pero entre que vienen y tardan, el salón sigue lleno de agua.

                La noticia es que más de 8.000 migrantes arribaron en cayucos y pateras a las Islas Canarias en la primera quincena de este mes. Lo que les digo, un drama. Si contamos desde que empezó el año, ya superamos los 25.000. Eso es más del 1% de la población de las Islas. ¿No les parece una barbaridad? Este desembarco que se está produciendo ya llega a valores del 2006, cuando se produjo la denominada “crisis de los cayucos”. Y, como dije antes, no podemos ponerle solución si vienen sin ser llamados y sin saber que aquí no hay infraestructura que lo aguante. Para que se acerquen al drama un poco más, en la Isla de El Hierro, este año; ya han llegado más de 4.000 ilegales, a un terreno de una población de 11.000 habitantes. Hablamos que, de cada dos herreños, llega un inmigrante.

                Pero haciendo referencia al seguro, cuando te inundan la casa. ¿Qué seguro nos cubre la llegada de inmigrantes? En este caso el responsable civil subsidiario: La Unión Europea. Estos inmigrantes no vienen a Canarias por el sol, las playas y su gente tan encantadora; vienen buscando el sueño europeo. Ese que ven en las televisiones en sus aldeas empobrecidas y quieren vivir algún día. Es por esto que toda Europa debe ser solidaria en la carga que se está sufriendo en las islas. Si no se pueden repatriar a los inmigrantes a sus países de origen (porque nunca te dicen de dónde son, por ejemplo) hay que repartirlos entre todos. No todo el esfuerzo lo tienen que hacer los 16 guardias civiles que hay en la isla de El Hierro. Me imagino que están haciendo horas extras sin tino.