Los cadetes galdenses quedaron apeados tras claudicar ante el todopoderoso Barça
El Moto Sport Juani de categoría cadete retornará a Gran Canaria a lo largo de la jornada tras afrontar su participación en la fase final del Campeonato de España. El conjunto entrenado por Nauzet Suárez acabó con un balance de una victoria y dos derrotas, convirtiéndo a pesar de ello uno de los conjuntos revelación.
Su participación se inició ante el conjunto del Balonmano Mislata. Los actuales campeones de la comunidad valenciana tuvieron que sudar la gota gorda para superar a un Moto Sport Juani que al descanso vencía 16-19. El mayor ritmo de los alicantinos unido a varios fallos en el tramo final del encuentro dilapidaron la ventaja, permitiendo al Mislata vencer 37-32.
El jueves llegaría el turno de enfrentarse al Instituto Pereda Dávilas, actual Campeón de Cantabria cuyo trabajo de cantera es reconocido a nivel nacional. Los galdenses saltaron al parqué sin complejos, manteniendo una fortaleza defensiva que anuló el potencial de los santanderinos. Con un resultado positivo de 15–19 al descanso, la segunda parte mostró la faceta más madura de un equipo que supo liderar los tiempos para acabar venciendo 37-40 con una actuación épica de los hermanos Yanis e Yyaron Ramírez con trece goles cada uno.
Con esa victoria al Gáldar aún le quedaban opciones de clasificación para semifinales, pero debían vencer a un Barça repleto de talento. A pesar de que en los primeros instantes del partido consiguieron ir a la par del conjunto catalán, poco a poco se comenzó a abrir brecha en el electrónico hasta llegar a un insalvable 8-23 al descanso. A pesar de que la diferencia era notable, el equipo de Nauzet Suárez siguió siendo fiel a su juego, acumulando minutos de alta intensidad y experiencia ante un club referencia, ante el que el marcador finalizó 21-40.
Jornadas de crecimiento y aprendizaje a pesar de la eliminación para un conjunto que ha conseguido poner en jaque a varios de los clubes Campeones de otras comunidades autónomas, en las que no sólo existe un mayor nivel competitivo, sino también un mayor número de clubes con los que competir en la liga doméstica. Mucho mérito el de una generación que ha vuelto a demostrar que con trabajo todo es posible.