Desde La Vinca Ecologistas en Acción “sentimos tristeza por cómo se oculta información sobre un grave accidente que ha afectado a personas y al medio ambiente del Barranco de Las Madres / Guadalupe / Azuaje.
ACLARAMOS -porque ya sabemos cómo funcionan por aquí las cosas- que NO CULPAMOS A NADIE -pero cada uno tiene que asumir sus responsabilidades- por lo que HA SIDO UN DESAFORTUNADO ACCIDENTE, pero nos llama la atención el oscurantismo que se ha mantenido tras haber sucedido un accidente en las instalaciones de una importante empresa del municipio de Firgas, al parecer el pasado martes 2 de mayo de 2023.
Según hemos podido saber -por la rumorología del pueblo, ya que que tengamos constancia no se ha producido ninguna versión oficial por parte de la empresa y/o instituciones públicas hasta el momento-, en la jornada del pasado martes se produce un escape accidental de más de 20.000 litros de sosa cáustica (hidróxido de sodio (NaOH) es un hidróxido cáustico que se usa a nivel industrial como sustancia básica, es altamente alcalina, corrosiva, absorbe la humedad y el dióxido de carbono del aire y descompone las proteínas a temperatura ambiente) en las instalaciones de esa empresa ubicada en el Barranco de Las Madres.
Como consecuencia de este accidente, al parecer se vieron afectados tres trabajadores con distinto grado de afección a quienes deseamos una rápida y favorable recuperación, y se vertieron esos más de veinte mil litros de sosa cáustica al cauce público del Barranco de Las Madres/Guadalupe/Azuaje, interactuando con el agua que de manera habitual circular por dicho cauce, generándose reacciones que por el momento desconocemos su afección al medio ambiente.
Por lo que sabemos, algunos cultivadores de berros y ñames se han dirigido a la empresa para pedirle explicaciones por el vertido y las afecciones a sus plantaciones (esto parece que ocurrió en la tarde del jueves, que es cuando nos enteramos desde este colectivo del accidente ocurrido). En la tarde del viernes 5 de mayo, 3 días después del vertido, un grupo de integrantes de La Vinca Ecologistas en Acción nos acercamos a la Reserva Natural Especial de Azuaje a comprobar posibles afecciones, pudiendo comprobar que en la mayoría de charcos del barranco existía una especie de espuma blanquecina y/o marrón, según las zonas, cubriendo dichos charcos que no es lo habitual en este barranco. Ascendimos barranco arriba durante más de 1,5 horas y pudimos comprobar que la presencia de espuma era cada vez mayor. No apreciando otros efectos sobre flora y fauna, pero desconociendo si esos efectos se habían producido o se podrían desarrollar en las siguientes jornadas, por lo que consideramos que desde las instituciones públicas se debería estar actuando en la zona (tomando y analizando muestras de agua, recogiendo cuerpos de fauna afectada si la hubiese…), informando a la población del entorno del barranco (agricultores/as, ganaderos/as, vecinos/as, senderistas, turistas…) de la situación como medida preventiva…
Nos sorprende y nos causa tristeza esta DEJACIÓN y esta “falta de respeto” a la salud de las personas, ganados, fauna y flora silvestre… del entorno cercano. Asimismo nos parece una falta de respeto a lo colectivo, un espacio natural único en el planeta como es la Reserva Natural Especial de Azuaje.
No entendemos esta manera de actuar, estamos en el año 2023, en el seno de la Unión Europea, y por desgracia se produce un accidente y la empresa que lo ha sufrido no lo comunica a la administración pública de manera inmediata, no se ponen en marcha protocolos de actuación para evitar posibles daños… Cuanto más fácil habría sido que lo que ha sido un desgraciado accidente se hubiese normalizado y se hubiese actuado de manera clara y rápida. Esperamos que la repercusión futura de este vertido quede en nada, pero no por arte de magia, sino porque se investigue y se depuren responsabilidades.
Por no haber, no se ha colocado ni un simple cartel en los senderos de acceso desde Firgas o desde Moya avisando a los cientos de usuarios/as –senderistas y/o turistas- que cada día visitan el espacio natural, a los propietarios de ganados, a los agricultores de la zona, nada como si no hubiese pasado nada, algo que consideramos que es intolerable y que no se corresponde con unos municipios democráticos del siglo XXI.
Aunque ya es tarde para arreglar los daños de este vertido, desde nuestro colectivo esperamos que, para que esto no vuelva a suceder, la empresa implemente medidas de seguridad complementarias y las administraciones responsables ejerzan el debido control sobre las mejoras a realizar en dichas instalaciones.
Por nuestra parte hemos procedido a poner en conocimiento del cuerpo de Agentes de Medio Ambiente los datos que tenemos sobre el vertido, así como les hemos enviado fotografías y vídeos de lo observado dentro de la Reserva Natural Especial de Azuaje, esperando su intervención en el lugar.
Terminar deseando, una vez más, la pronta y total recuperación de los tres trabajadores afectados, a quienes deseamos todo lo mejor para su salud._______________________________________________