DE: MARÍA MILAGROSA SUÁREZ MEDINA. DNI Nº:42872550K A/A: ALCALDE PEDRO M. RODRÍGUEZ PÉREZ
OBJETO: ACREDITACIÓN DE REPRESENTACIÓN.
En contestación a su escrito, recibido en fecha 26 de enero de 2023, entregado en mano por los agentes de la policía local de este municipio, requiriendo subsanación (se adjunta minuta entregada en el mismo acto, en el que se hace referencia al documento en cuestión), mostrarle nuestro mayor desprecio y máxima indignación a la citada solicitud.
Esta petición de representación parecería una broma, por cierto, de mal gusto, si no fuera porque hablamos de mi padre y lo que estamos viviendo no es un sainete de los hermanos Álvarez Quintero sino, la más dura realidad y, el dolor desgarrador de la pérdida de nuestro padre.
Que nos haga usted esta extemporánea petición para que acreditemos la representación de nuestro padre fallecido, nos parece un nuevo agravio, innecesario y gratuito por parte de la máxima autoridad de mi municipio.
Pronto ha olvidado que, usted mismo nos ha enviado una protocolaria y normalizada carta de condolencia hace escasas semanas por, la muerte prematura de nuestro padre.
Me va a permitir que, aproveche esta nueva provocación que nos hace, la cual lo sigue calificando del tipo de persona en que se ha convertido para, reprocharle, siempre con la máxima educación, el modo en que nos ha enviado esa carta de condolencia, a través de terceros, ajenos a nuestra familia o al consistorio. Ni siquiera se dignó usted a presentarnos los respetos, personalmente, ni en el tanatorio, ni en la misa-funeral.
Le volvemos a expresar nuestros sentimientos, creemos que ha perdido lo más importante que puede tener un ser humano (la humanidad) y, todo lo ciñe y envuelve en un halo de poder y autoridad. Es usted cruel con nosotros y, sus actitudes y comportamiento sólo hacen reafirmarnos en lo que muchos, en el pueblo, pensamos de usted.
Una cura de humildad, de volver a los orígenes, de contemplar la realidad desde abajo debería ser asumida por todos, incluso por usted; le aseguro que ese acto de constricción, nos haría ser mejores personas.
Sr. alcalde reflexione y, haga una revisión de su vida, piense si ha dejado muchos cadáveres en el camino, recapacite en su trayectoria de lo que, usted era en sus inicios y, cómo actúa en estos momentos.
Desde mi humilde opinión se ha transformado, como en la novela de R.L. Stevenson, de ser un sanitario comprometido con la ciudadanía a, lamentablemente, convertirse en un petulante regente. Su ego está por encima de los intereses de la comunidad a la que debiera servir, como así juró al asumir su cargo de primer edil.
Usted que, desempeña un compromiso público de tanta notoriedad como ser el alcalde de un pueblo, de mi pueblo, Santa María de Guía, usted que asume nuestra representación, la persona que debería estar junto y en convivencia con sus conciudadanos, creo honestamente que, está haciéndole un flaco favor a esa alta distinción que ostenta.
El alcalde, esa persona elegida por sufragio que, todos respetamos, en la que confiamos y esperamos sea atenta, empática, preocupada por el bienestar de sus convecinos, esa persona, usted, desgraciadamente, hace mucho tiempo que ha dejado de serlo y, los hechos, así lo demuestran.
El alcalde que, tradicionalmente junto con el médico, el cura y, el maestro representa las figuras con valores, pilares a mimetizar por nuestros jóvenes, usted lo desacredita.
Al contrario, todo aquello que usted se comprometió a defender en su actividad pública se aleja diametralmente de lo que solicitan y demandan los que vivimos en este pequeño municipio. Recuerde el alto porcentaje de firmas recogidas, de personas mayores de 18 años que, se han opuesto a sus inhumanas acciones contra los mayores del municipio.
Le escribo lo que siento, no lo juzgo (Dios y la justicia terrena lo harán), la muerte de nuestro padre me ha hecho valiente y, me he desembarazado de la pusilánime venda del miedo. Usted utiliza el miedo para perpetuarse. Yo, ya no le tengo miedo y, éste es el primer escalón para que las cosas empiecen a cambiar.
Espero y deseo que haya muchas personas como yo que, se deshagan de esa venda que nos oprime y, podamos avanzar en una sociedad más justa, donde el respeto a los mayores y el trato digno y esmerado hacia ellos sea lo cotidiano y usual. Que los mayores y sus problemas sea una preocupación y, el paradigma de actuación a seguir por, las autoridades que nos administren y representen.
Espero que los valores y el respeto hacia nuestros mayores sean los signos de identidad de nuestros representantes y, aunque nuestro padre ya no lo pueda vivir, ni disfrutar, sí lo hagan otros tantos mayores que, no pueden alzar la voz en pro de sus derechos y, a los que les debemos ese trato digno, que usted les ha negado.
Estamos seguras de que nuestro padre se encontrará orgulloso de nosotras, allí en el cielo, junto al Santísimo y, esta lucha será parte del homenaje póstumo que le brindaremos.
Uniéndome al resto de los familiares desplazados innecesariamente por usted a Taliarte y que, fue refrendado, este cruel acto, por su acólito teniente de alcalde, señor Goncalves, le recordamos que, si su interés e intención con esta notificación de representación que nos solicita es para que, desistamos de nuestro derecho a tener la historia clínica de nuestro padre, si pretende aletargar o retrasar la entrega de estos documentos, ya le adelantamos que, no cejaremos en nuestro legítimo derecho.
Es un derecho, como herederas de Antonio, que nos entregue la totalidad de los documentos pertenecientes a nuestro progenitor, como así ya han hechos otras instituciones sanitarias, sin ponernos ningún problema, manteniendo la transparencia de los actos. Su obligación es entregarnos lo que nos pertenece para, conocer de primera mano la realidad clínica de lo acontecido con mi padre durante el tiempo que estuvo en la residencia Tarazona.
Como persona respetuosa de la ley, le adjuntamos los documentos anexos.
A la espera que nos remita, con la máxima urgencia, lo solicitado y, puedan ser analizados por personal competente, yo y mi familia, nos despedimos con educada atención.
MARÍA MILAGROSA SUÁREZ MEDINA Y FAMILIA, EN REPRESENTACIÓN DE JOSÉ ANTONIO SUÁREZ SANTIAGO.