No sólo detectar un bulto: retracción en la piel, secreción o cambio de color son otros signos de alarma
- El cáncer de mama incrementa su incidencia un 10% en Canarias entre 2018 y 2023, cifra que aumenta al 20% en la última década. Una de cada cinco mujeres diagnosticadas con esta enfermedad tiene menos de 50 años.
- La probabilidad estimada de desarrollar cáncer de mama a nivel nacional siendo mujer es una de cada ocho
- La obesidad y el sedentarismo, el alcohol, el tabaco y la exposición a altos niveles de contaminación son factores modificables que pueden aumentar el riesgo
La aparición de un bulto en el pecho no es la única señal de alarma ante el cáncer de mama que indica la necesidad de acudir a consulta. La retracción de la piel de la mama, la secreción a través del pezón, si es sanguinolenta, o el cambio de coloración son otros signos a tener en cuenta, aunque sólo las pruebas correspondientes indicarán si se trata de un tumor benigno o cáncer de mama.
En general, hay que vigilar todo aquello que suponga un cambio repentino. “Es importante la autoexploración y actuar ante cualquier cambio corporal acudiendo a consulta. Además, hay que tener en cuenta que el cáncer de mama puede ser también asintomático. De ahí la importancia de realizarse controles periódicos”, explica el doctor Ricardo Caballero, especialista en ginecología del Hospital Vithas Tenerife y parte del Instituto Oncológico Vithas.
Según los protocolos recomendados se establecerán pruebas de diagnóstico complementarias, la mamografía, por ejemplo, a partir de los 50 a 69 años. “Esto no quiere decir que ante una situación excepcional se pueda solicitar antes o después. La tendencia en otros países es a partir de los 40 años”, continúa el doctor Caballero.
De hecho, “una de cada cinco mujeres diagnosticadas con esta enfermedad en Canarias tiene menos de 50 años. Esta cifra sigue en aumento, con un 10% de los casos diagnosticados en mujeres menores de 40 años, por lo que es más que recomendable realizar pruebas a partir de esta edad”, alerta la doctora Virginia Benito, especialista en ginecología oncológica del Hospital Vithas Las Palmas y Vithas Baren, así como miembro del Instituto Oncológico Vithas.
El cáncer de mama es una enfermedad compleja influida por múltiples factores, tanto genéticos como ambientales y estilo de vida. Algunos de ellos no pueden ser modificados, como la edad, con un incremento de la incidencia a partir de los 50 años, aunque existe casos cada vez más precoces; antecedentes familiares directos de 1-2º grado portadores de genes como el BRCA1-2 o factores hormonales, como la menstruación precoz y menopausia tardía. Por ello, la exposición a tratamientos hormonales en la menopausia que deben ser individualizados y bien controlados, explica el doctor Ricardo Caballero. También suponen factores de riesgo la maternidad tardía o nuliparidad, así como la exposición a tratamientos de estimulación ovárica.
Y continúa destacando que otros factores de riesgo son modificables, como la obesidad y el sedentarismo, el consumo de alcohol y/o tabaco y la exposición a altos niveles de contaminación ambiental.
Por tanto, es fundamental mantener un peso saludable, realizar actividad física regularmente, llevar una dieta equilibrada rica en frutas y verduras, limitar el consumo de alcohol y abandonar el tabaco, junto a la revisión periódica, la autoexploración y la atención frente a posibles cambios, advierte la doctora Benito.
Incidencia
Según los últimos datos recogidos por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en 2024 se diagnosticarán 36.395 nuevos casos de cáncer de mama, siendo el tumor más frecuente entre las mujeres a nivel nacional por delante del cáncer colorrectal, de pulmón, cuerpo uterino, tiroides y páncreas.
En España, aproximadamente el 30% de los cánceres diagnosticados en mujeres se originan en la mama. El cáncer de mama es ya el tumor más diagnosticado del mundo, incluyendo a ambos sexos, superando al cáncer de pulmón, según datos publicados en 2022 por el Centro de Investigaciones sobre el cáncer (IARC).
En cuanto a la tasa de incidencia en España, se estiman 81 casos por cada 100.000 habitantes. La probabilidad estimada de desarrollar cáncer de mama siendo mujer es de uno de cada ocho. Este tipo de tumor suele aparecer entre los 35 y los 80 años, aunque la franja de los 45-65 es la de mayor incidencia, al ser el momento en el que se producen los cambios hormonales en los períodos de peri y post menopausia, una curva de incidencia que continúa aumentando a medida que la mujer envejece.
Esta patología ha incrementado su prevalencia en los últimos cinco años, desde 2018 hasta 2023, en un 10%, cifra que alcanza el 20% en la última década, esto es, entre 2012 y 2023 en las Islas. No obstante, ha reducido su mortalidad, con tasas de supervivencia superiores al 85% a los cinco años, gracias a los programas de cribado y mejoras en los tratamientos. Las estadísticas sobre el cáncer de mama en Canarias muestran una tendencia comparable a la de otras áreas de España y Europa, evidenciando un aumento en la incidencia en las últimas décadas. En 2023, se registraron 1.583 nuevos diagnósticos en las Islas, lo que indica una tendencia creciente.
“Es necesario señalar que un 30% de aquellas pacientes que recibió un diagnóstico temprano tendrá una recaída con metástasis y que, según el informe de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) “Las cifras del cáncer 2023”, el tumor de mama continúa siendo la primera causa de muerte por cáncer entre las mujeres en España con 6.528 fallecimientos cada año, el 5,8% de todas las muertes por cáncer. La tasa de mortalidad por cada 100.000 habitantes en nuestro país es de 22.7”, concluye la doctora Benito.
Sobre Vithas
El grupo Vithas está integrado por 20 hospitales y 38 centros médicos y asistenciales distribuidos por 14 provincias. Los 12.600 profesionales que conforman Vithas lo han convertido en uno de los líderes de la sanidad española. Además, el grupo integra a la Fundación Vithas, Vithas Red Diagnóstica y la central de compras PlazaSalud.
Vithas, respaldada por el grupo Goodgrower, fundamenta su estrategia corporativa en la calidad asistencial acreditada, la experiencia paciente, la investigación y la innovación y el compromiso social y medioambiental.