Directora: Justine Triet
Guion: Justine Triet y Arthur Harari
Intérpretes: Sandra Hüller, Swann Arlaud y Milo Machado GranerSinopsis:
Una mujer es sospechosa del asesinato de su marido, que mantiene que fue él el que se suicidó. El hijo ciego de ambos se enfrenta a un dilema moral como único testigo.
MI CRÍTICA:
Pocas películas me suelen gustar cuando adolecen de tramas secundarias. En esta película las hay, pero están tan pegadas a la trama principal y al juicio que desencadena la muerte del padre de la familia, que parece que fueran la misma. Esta no me terminó de encantar y a ratos se me hizo un pelín pesada, pero las ganas de ver como acababa me mantuvieron expectante.
En realidad, esta historia cuenta lo que cotidianamente se da en nuestros informativos. Juicios y más juicios inundan nuestras cadenas de noticias. Aquí lo que haremos será profundizar bastante en el desarrollo de esas informaciones que vemos a diario, centrándonos en un caso en concreto. El detonante de la trama está claro: el padre ha muerto y hay que dilucidar en el juicio si fue un suicidio o fue la esposa la que lo mató. Y ahí se empiezan a desarrollar las acciones, implementando un punto de giro de vez en cuando para que no se haga tediosa. En ese aspecto la reconozco hábil. Lo dicho, me suelo aburrir mucho con las películas monotrámicas, pero esta, cuando empezaba a languidecer, aparecía un giro nuevo que le remontaba de nuevo. En su contra, diré que algunos de estos giros fueron un poco forzados.
Ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cannes. Ahí es nada. No puedo opinar por no haber visto las demás, pero me parece un premio demasiado grande para una película que no va a pasar a la historia de nada. Te entretiene, a ratos te emociona de impotencia. Y, como única expectación, te intriga hasta el final. Poco bagaje para competir para un Óscar.
Lo que más me ha gustado de la película son las interpretaciones de los actores principales, la sospechosa de asesinato (encarnado por una sublime Sandra Hüller) y el hijo, testigo de los hechos (el joven Milo Machado-Graner). Ella, nominada al Óscar, compite en una candidatura muy fuerte que no creo que se lleve por encima de Emma Stone o Carey Mulligan. Pero la forma en que nos hace creíbles los pequeños matices es impresionante. Siempre he dicho que es más difícil interpretar sutilezas que estridencias. En esta película, nos sabe poner perfectamente, en cada momento, en el estado psicológico en el que se encuentra. Y son muchos y variados. El chico, para su edad, deja claro que es un candidato a una larga carrera.
Para finalizar, poco más. Esta película te va a gustar o te va aburrir mucho. Si te gustan los chismes y las noticias de juicios te divertirás. Las escenas con la jueza y los abogados tienen momentos de diálogos impresionantes. Es más, me gusta que en ningún plano se ve al jurado. ¿Por qué? Quiero entender que la directora nos dice que el jurado somos nosotros mismos. Ahora te digo, si crees que vas a ver una película de acción y asesinatos. Te vas a aburrir, pero bien.
NOTA: Bien trenzada y con giros hábilmente colocados… le pongo un 6.
5 NOMINACIONES:
Mejor Película
Mejor Directora (Justine Triet)
Mejor Guion Original (Justine Triet y Arthur Harari)
Mejor Actriz (Sandra Hüller)
Mejor Montaje (Laurent Sénéchal)