La regatista del RCNGC Lili Skomska, remató este lunes su brillante actuación en la 39º edición del Trofeo AECIO con dos primeros y un tercer puesto en las tres mangas del día que le han valido colgarse finalmente el oro como campeona absoluta de la tradicional regata navideña del Real Club Náutico Gran Canaria, después de haberse mantenido como líder provisional durante las cuatro jornadas. Manuel Florido, por su parte, también del RCNGC, se colocó segundo de la general y se hizo con el oro en la sub 16 masculina, seguido por Marta Mansito (RCNGC) y Gonzalo Ramos (RCNT) en la general.
En cuanto a los podios, además de Skomska y Florido, los completan Maruca Guindín (RCNGC) y Santiago Pérez (RCNT) que se cuelgan el oro en la categoría sub 13, y Patricia Sosa (Club Marítimo Varadero) y Pablo J. Medina (RCNGC), en sub 11.
Durante la ceremonia de clausura celebrada esta tarde, se entregaron también los regalos para los dos primeros clasificados de la sub 16: un casco de Optimist para Skomska y una vela para Florido.
100 regatistas de 10 clubes náuticos de distintas islas canarias y varias comunidades autónomas, además de Suecia e Italia, y cuatro días de competición en el agua con unas magníficas condiciones es, en líneas generales, el balance de esta 39 edición del Trofeo AECIO, que han organizado el Real Club Náutico de Gran Canaria y la Real Federación Canaria de Vela por delegación de la Real Federación Española de Vela y con el apoyo del Gobierno de Canarias, el Cabildo de Gran Canaria, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, y AECIO Canarias, además de la colaboración de la Federación de Botes de Vela Latina y la empresa Naviera Armas Trasmediterránea.
Las excelentes condiciones de la bahía de Las Palmas de Gran Canaria para la navegación a vela se han puesto de manifiesto de nuevo en esta regata, con cuatro días de buen viento del sureste -que ha oscilado de los 7 a los 12 nudos- y una ola mayor los dos primeros días y más tímida los dos segundos, lo que permitió cumplir prácticamente el programa, a falta solo de una manga por el retraso el primer día y la decisión por parte de los jueces de no alargar las horas en el agua dada la edad de algunos participantes.
La presidenta del RCNGC, Maica López Galán, presidió la ceremonia de entrega de trofeos, que tuvo lugar en el Salón Dámaso del RCNGC, y a la que asistieron, entre otros, el viceconsejero de Deportes del Gobierno de Canarias, el directivo de la Real federación Canaria de Vela, Alejandro de Juan, y el delegado de AECIO José Ramón Medina, así como miembros de la directiva del RCNGC .
La presidenta tuvo palabras tanto para los regatistas que se han estrenado este año en la regata como para los que se despiden, y agradeció la colaboración del gran número de personas que hacen posible que el trofeo se celebre cada año. “La clase Optimist es la cuna de nuestros futuros campeones y campeonas. En estas pequeñas embarcaciones se gestan los grandes sueños, y para nuestro club, apoyar esta clase es invertir en el futuro de la vela, en los valores deportivos y en la formación de personas”, afirmó en su discurso.
Tanto es así, que una de las participantes, Marta Mansito, se colgó recientemente el oro en el campeonato del Mundo celebrado en Argentina, además de por equipos, logro por el que recibió un pequeño homenaje durante esta entrega de trofeos.
El comodoro del club, Alejandro Martín, por su parte se felicitó por el triunfo de Lili Skomska, que supone que el trofeo absoluto del AECIO se quedan en el RCNGC, ya que la regatista -que conquista el AECIO por primera vez- sucede al propio Florido, campeón en 2023 tras cuatro años en los que la victoria había sido para regatistas de otros clubes.
Concluye una nueva edición del Trofeo AECIO, la regata más veterana del Real Club Náutico de Gran Canaria, un evento que trasciende el ámbito deportivo y que siempre deja un sabor agridulce al marcar el adiós de la clase Optimist para los regatistas que cumplen 15 años durante el año del trofeo.
A lo largo de sus 39 años de historia, el Trofeo AECIO ha sido el escenario donde generaciones de jóvenes regatistas de diversas procedencias han vivido su magia, una experiencia única que se debe tanto a las fechas navideñas en las que tiene lugar como al espíritu de convivencia que surge entre los participantes.