- La inversión alcanzó los 590.505,79 euros, aportados en su mayor parte por el Cabildo de Gran Canaria
- La Plaza cuenta con una zona central de 1.000 metros cuadrados, un espacio con parasoles de 150 metros cuadrados, más de 160 metros lineales de zonas de asiento y se amplía el parque infantil a 400 metros cuadrados
El alcalde de Guía, Pedro Rodríguez, y el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, inauguraron este jueves las obras de mejora y acondicionamiento de la Plaza de San Pedro de La Atalaya, una actuación que ha permitido recuperar el máximo espacio de uso para los ciudadanos y dotarla de mayor confort, poniéndola a disposición de los vecinos para su disfrute a partir de hoy. Este proyecto ha contado con una inversión de 590.505,79 euros financiados por el Cabildo, a través del Plan de Cooperación con los Ayuntamientos, y por el Ayuntamiento de Guía.
El primer edil guiense agradeció al presidente insular “el apoyo y respaldo” que ofrece siempre a Santa María de Guía “tanto en lo que se refiere a inversiones económicas en nuestro municipio como a su presencia en todos aquellos actos que para nosotros son de especial relevancia, como lo es hoy la inauguración de las obras de remodelación de esta plaza en un barrio tan importante como es La Atalaya”, subrayó.
Un compromiso con el municipio de Santa María de Guía que el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha destacado como necesario en su intervención, felicitando a los representantes municipales por el magnífico trabajo que están desarrollando en todas las áreas de gobierno para que esta ciudad siga avanzado, progresando y mejorando la calidad de vida de sus vecinas y vecinos.
La intervención en la Plaza de La Atalaya ha permitido la creación de un espacio central libre de obstáculos frente al escenario de más de 1.000 metros cuadrados, ubicando los usos complementarios en el perímetro. De este modo surgen las tres zonas principales en las que se ha actuado a través de este proyecto: el escenario, la zona de reunión bajo los parasoles y el parque infantil. En cuanto al escenario, se ha aumentado prácticamente el doble su superficie -pasando de los 94,75 metros cuadrados a los 172 metros cuadrados- ofreciendo así una plataforma adecuada y óptima para la celebración de eventos.
El parque infantil, ahora con 400 metros cuadrados, aumenta en más de 140 metros cuadrados la superficie de juego anterior a las obras y cuenta ahora con un conjunto de atracciones de última generación, en condiciones de seguridad certificadas, tanto en equipamiento como en suelo amortiguador.
La zona de parasoles, con 150 metros cuadrados frente a los 35,7 metros cuadrados de antes, nace con el propósito de configurar un verdadero espacio de encuentro, donde los vecinos encuentren una zona verdaderamente adecuada para una mayor interacción y vida social. La zona de asientos creada, con 142 metros lineales, aumenta en más del doble a la anterior a los trabajos (63,8 metros lineales).
El perímetro de la Plaza experimenta el mayor cambio: la vegetación se convierte en el verdadero protagonista tras la eliminación de los muros existentes, quedando a la vista un talud de tierra natural que suaviza la perspectiva del contorno. La vegetación obtiene así un mayor protagonismo.
Mejoras en accesibilidad
El proyecto ejecutado amplía la rampa de acceso frente a la Iglesia, instalando pasamanos dobles tanto en los laterales como en el centro. Asimismo se ha añadido pavimento señalizador de advertencia en todas las escaleras y en la escalera principal se ha instalado un pasamanos doble tanto en los laterales como en el centro.
El Pilar
Asimismo se ha recuperado también un elemento de esta Plaza de La Atalaya, colocando una réplica del emblemático Pilar instalado aquí en las primeras décadas del pasado siglo XX “en lo que pretende ser un homenaje a los mayores de este barrio que tantas dificultades padecieron durante su infancia y juventud”, según reza el texto.