
Paseo Literario
El Condado de Velhoco
Hace tanto tiempo que me fui, que no he encontrado a nadie conocido por las tranquilas calles. Llevo un buen rato sentado en las escaleras
Hace tanto tiempo que me fui, que no he encontrado a nadie conocido por las tranquilas calles. Llevo un buen rato sentado en las escaleras
Pero no me mires cuando yo no te mire, mírame cuando sientas que mis ojos se posan en ti, cuando sientas que con la mirada
—¿Está llorando? —No, a mis años ya no se llora, las lágrimas abandonan los ojos. —¿Y por qué quieren hoy abandonar las lágrimas sus lindos
En las lenguas de Teror ya se afilan las envidias y comienza la zaranda tras visillos y cortinas. – ¡Yo no soy de los que