
Paseo Literario
Las dos Enamoradas
Cada domingo a la misma hora, escuchaba una música desconocida. Sin darse cuenta, de ella estaba enamorada. No era una música cualquiera, era una música
Cada domingo a la misma hora, escuchaba una música desconocida. Sin darse cuenta, de ella estaba enamorada. No era una música cualquiera, era una música
Mi admirado verano, hace una semana que rozas mi piel, te pido disculpas por no haberte dedicado unas palabras como “Dios manda” y te mereces
No sabía si debía escribirlo o no, pero después de mucho pensar sobre ello, me decidí a hacerlo. Ha pasado una semana desde la jornada
Ella lo amaba en silencio, como si del blanco y del negro se tratara, ambos contrarios pero totalmente complementarios. Carmen era un encanto, además de