Moon World, con su constante y excelsa actividad profesional, nos trajo otra increíble actuación, esta vez del mítico e histórico grupo OBK, emblema del tecnopop hispano e internacional, que fue más que un concierto. En palabras de Jordi, su reconocido vocalista, lo vivido el domingo 18 de mayo, en el Auditorio Alfredo Kraus (Las Palmas de GC.), se cuenta como una auténtica fiesta en este recinto situado en esa tan bella playa de Las Canteras, que se transformó en una verdadera discoteca, con el público totalmente entregado cantando, moviéndose, bailando….
Desde los primeros acordes de ese clásico que es “Tú sigue así”, el auditorio con el respetable se estremeció con el vigor, sentimiento y espectáculo audiovisual que ofreció el grupo. Y es que el legado de OBK es inmenso con sus múltiples hit e himnos como “Quiéreme otra vez”, “De que me sirve llorar” o “El cielo no entiende”.
Es impresionante el sonido y ritmo marca de la casa, ese tecnopop tan característico de la banda, que conmueve los oídos y el alma junto a sala, con canciones como “Oculta realidad”, “Dicen”, “A ras de suelo” o “Yo no me escondo”. Esas alegres y festivas composiciones como “Mi razón de ser”, que continuaron regocijando al respetable.
El lado más romántico e intimista llegaron con otros clásicos, esas bellas composiciones: “Falsa moral” y “La princesa de mis sueños”; junto a su lado más potente, con esos toques roqueros que, junto a la mencionada Tú sigue así, llegaron con “Lucifer” y ese tributo a su banda de referencia, Depeche Mode, con una mezcla tan brillante como “I Feel you/Personal Jesus” y todo el recinto vibrando al unísono.
La apoteosis final llegó con “Historias de amor”, ese tema de leyenda que junto con otros catapultó a la banda en su momento, con la gente ya dándolo todo y disfrutando al máximo con el grupo.
En definitiva, con OBK llegó a Las Palmas de Gran Canaria esa memoria de una de las páginas y épocas más gloriosas de nuestra música que, actualmente, sigue enamorando a la gente con su arte y herencia imperecedera. Esperemos tenerlos de vuelta por aquí, para que nos sigan haciendo gozar con su legado eterno.