Hoy es 25 de noviembre Día Internacional de la eliminación de la Violencia hacia la Mujer, como cada año y desde hace algunos, conmemoramos y hacemos visible la violencia machista como problema social través de actos, manifiestos y declaraciones en las que dejamos claro y alzamos la voz con un NO rotundo ante este tipo de atrocidad. Sin lugar a dudas, estas manifestaciones son necesarias, pero no suficientes. Podemos hacer algo en nuestro día a día para ayudar a las víctimas y es entenderlas, validarlas, acompañarlas en su proceso. Nunca cuestiones a una mujer que te cuenta que la maltratan. No la revictimices con preguntas como ¿ por qué no lo dijiste antes? ¿ por qué aguantaste eso?, ¿ cómo no lo dejaste?, ¿ por qué volviste con él? …Porque estamos trasladando el foco del problema a ella, la hacemos responsable de ese maltratado, la culpabilizamos, tal como ha hecho su maltratador.
Ella se ha mantenido porque estaba en un proceso de victimización, en un círculo de la violencia, en la que se alternan las agresiones con una “ luna de miel” en la que hay arrepentimiento y promesas de cambio por parte del agresor. En este proceso disminuye su autoestima, duda de la realidad, tiene miedo, se siente indefensa, pierde su identidad, y cada vez queda más debilitada y con menos capacidad para tomar decisiones por lo que se le hace difícil salir de esa situación.
Cambiemos el foco de atención hacia el agresor y no justifiquemos bajo ninguna circunstancia por qué le grita, por qué la insulta , por qué la golpea, por qué la fuerza a tener relaciones, por qué la ningunea, por qué la humilla, por qué rompe sus cosas, por qué le tira del pelo, por qué la empuja, por qué le lanza objetos, por qué le aprieta la mano , por qué la difama , por qué la amenaza, por qué la mata. Nada puede amparar esta crueldad , escapa a la razón y sólo hay un responsable, el maltratador.
Mira a la mujer como una víctima víctima , no la critiques, ni cuestiones tan solo acompáñala.
Alejandra Reyes
Psicóloga Sanitaria.


