Rumanía, ubicada en el sureste de Europa, es un país de contrastes sorprendentes que combina una historia rica y turbulenta con una belleza natural impresionante. A menudo asociada con la leyenda del Conde Drácula, la nación es mucho más que sus mitos góticos. Es una tierra donde los castillos medievales se alzan sobre colinas boscosas, las iglesias de madera milenarias parecen sacadas de un cuento de hadas, y los vibrantes centros urbanos bullen de vida.
La historia rumana es un tapiz tejido con influencias de dacios, romanos, otomanos y austrohúngaros. Su capital, Bucarest, conocida alguna vez como «El pequeño París», deslumbra con su arquitectura ecléctica, desde el imponente Palacio del Parlamento (uno de los edificios más grandes del mundo) hasta los pintorescos barrios antiguos.
Más allá de la capital, el país está salpicado de tesoros históricos. En la región de Transilvania, la ciudad de Brașov te transporta a la época medieval con sus murallas fortificadas y la famosa Iglesia Negra. Muy cerca, el Castillo de Bran atrae a miles de visitantes con su misteriosa silueta y su conexión (a menudo exagerada) con la leyenda de Drácula.
Otro lugar que no te puedes perder es Sighișoara, una ciudadela medieval perfectamente conservada y declarada «Patrimonio de la Humanidad» por la UNESCO, que parece detenida en el tiempo. Y en la región de Maramureș, las singulares iglesias de madera y el Cementerio Alegre de Săpânța, con sus epitafios humorísticos, ofrecen una perspectiva única de la cultura local.
La geografía de Rumanía es tan diversa como su historia. Los majestuosos Montes Cárpatos cruzan el país y son el hogar de una de las mayores poblaciones de osos pardos de Europa. Son perfectos para el senderismo, el esquí y la simple admiración de sus picos y valles.
En el este, el Delta del Danubio es un paraíso para los amantes de la naturaleza. Este humedal es la segunda delta más grande de Europa y una «Reserva de la Biosfera», con una biodiversidad asombrosa que incluye miles de especies de aves, peces y plantas.
Rumanía es un destino que sorprende y deleita, un lugar donde la tradición y la modernidad se encuentran. Sus paisajes en sus 238 Kilómetros cuadrados, su historia y la calidez de sus 22 millones de habitantes, hacen de este país una joya por descubrir en el corazón de Europa.