Martín Molina Orihuela, histórico médico de Gáldar, ha fallecido este viernes a los 77 años de edad. Su capilla ardiente se encuentra en el tanatorio municipal de San Isidro, donde tendrá lugar este sábado el responso a las 16.30 horas y, a continuación, a partir de las 17.00 horas, se llevará a cabo el sepelio en el cementerio de San Isidro.
Teodoro Sosa, alcalde de Gáldar, dio el pésame a sus familiares por el fallecimiento de un «gran hombre que dedicó su vida a cuidar de generaciones de galdenses». «Fue un profesional muy querido, cuya entrega y cercanía marcaron a sus pacientes, un ejemplo de vocación y humanidad. Se ha ido un buen médico y, sobre todo, una buena persona», continuó.
Residente en la calle Capitán Quesada, estaba casado con María del Carmen Saavedra Alonso y tenía dos hijos: Víctor Alejandro y Martín Víctor. Su familia también estaba compuesta por su hermana, María Encarnación, y por Juana Santiago Monzón.
Martín Molina ejerció cerca de 40 años, en los que trabajó en el Centro de Salud de Gáldar y además tenía una consulta particular en su casa. Era un apasionado del cine y, especialmente, de la lectura.