Se recuperará el tiempo perdido para que los túneles de Faneque estén operativos en el primer semestre de 2022

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*El consejero Sebastián Franquis asegura a Roque Aldeano que la actual situación económica no incidirá en la ejecución del nuevo trazado Agaete-El Risco. 

El primer tramo de la segunda fase de la carretera de La Aldea, donde se incluye los túneles de Faneque,  se espera que estará  concluido en el plazo previsto de dos años y medio, según señalaron hoy responsables de la obra, visitada esta mañana por el consejero regional de Obras Públicas y Transporte, Sebastián Franquis.  Dicha información  disipa en principio la preocupación del Foro Roque ante la ralentización de las perforaciones que se llevan a cabo motivados por las circunstancias derivadas de las normativas impuestas por el COVID-19 y la no utilización de explosivos por retrasos en la construcción de los polvorines necesarios, debido a trabas burocráticas.

Franquis trasladó al portavoz del colectivo ciudadano, Rafael Ramos, que no peligra la ejecución del nuevo trazado Agaete-El Risco, ante la actual situación económica. Los 153 millones presupuestados de una obra  a ejecutar en 65 meses están asegurados a través del convenio de carreteras Canarias-Estados. Los trabajos  que se iniciaron el pasado mes de octubre disponen para el presente ejercicio con certificaciones próximas a unos 20 millones de euros. El temor de los aldeanos radica en la mala experiencia de la primera fase La Aldea-El Risco que con un periodo de ejecución de 40 meses, luego se emplearon ocho años en terminar las obras.

Actualmente, por los motivos reseñados, sólo se avanzan unos dos metros diarios al sólo utilizarse maquinaria. Con el uso  de explosivos tipo gel, previsto para finales de junio, se podrá ahondar 8 metros en cada una de los cuatro tajos del bidireccional túnel de Faneque de unos 2.100 metros de longitud. También se trabajará en el túnel de Guguillo, en ambos durante 24 horas al día y de lunes a sábado. Técnicos de la UTE conformada por Acciona, Ferrovial, Lopesan y Bitumex aseguraron que se recuperará el tiempo perdido.

La GC-200 que generalmente utilizan los aldeanos para acceder al norte y a la capital sólo será cerrada al tráfico en los momentos de las voladuras que se anunciará previamente. Visto el estado fraccionado del relieve del macizo de Faneque, se instalará sismógrafos para conocer las afecciones de las explosiones  y reducir al máximo los riesgos en una vía donde coincidirán las obras con el tránsito de vehículos.

Los 3.3 kilómetros en ejecución entre la primera fase de la carretera de La Aldea y el barranco de Segura, además de los túneles de Faneque, incluye el túnel de Guguillo de 600 metros y el viaducto que atravesará el barranco de El Risco de 520 metros.