Teror retira los gallos y gallinas salvajes de las calles y espacios públicos

Ante las quejas de la población, una empresa especializada está llevando a cabo la retirada de unas 200 aves en distintas zonas del municipio.

El Ayuntamiento de Teror, a través de las áreas de Salud Pública y Bienestar Animal, ha iniciado la retirada de alrededor de 200 gallos y gallinas salvajes que han formado pequeñas colonias incontroladas en las calles y espacios públicos en diferentes zonas del municipio.

Ante la petición vecinal de controlar las colonias de aves en las calles, el Consistorio terorense ha encargado a una empresa especializada la retirada de estos animales, tras realizar un seguimiento para su localización, principalmente en zonas de San José del Álamo, San Matías, El Hoyo, Avenida del Cabildo y en los alrededores del Parque de Sintes, en el Casco de Teror.

La retirada de los animales se realiza de forma controlada y utilizando sistemas no agresivos con los animales, que son capturados con jaulas y enviados a granjas previamente concertadas para su recogida.

“Desde el Área de Bienestar Animal vigilamos que los animales sean tratados de forma correcta y que se deriven a granjas con garantías sanitarias y un tratamiento correcto”, explicó la concejala de Bienestar Animal, Laura Quintana.

Al mismo tiempo, el Ayuntamiento de Teror recuerda que, por razones de salud pública y protección al medio ambiente urbano, se prohíbe el suministro de alimentos a animales callejeros que no estén controlados por colonias registradas, así como a cualquier otro cuando de ello puedan derivarse molestias, daños o focos de insalubridad.

En los últimos años ha ido creciendo progresivamente el número de estos animales hasta contarse alrededor de dos centenares, en mayor cuantía gallos, más que gallinas y pollos. Además de las molestias ocasionan a la vecindad, las colonias incontroladas de aves son focos de infección que generan problemas de salud pública. Por otra parte, generan peligro en las calles y carreteras, ya que al cruzar sin control en las vías públicas, pueden producir  colisiones de coches tratando de evitarlas.