Ha fallecido María del Carmen Castellano Déniz, nacida en Cuba, con raíces en el municipio de Arucas y vecina de Teror desde su matrimonio con Vicente Hernández Rivero, único hijo del comerciante y político terorense José Hernández Jiménez y de su esposa Dolores Rivero Ortega

 

Recibió el reconocimiento de Hija Adoptiva del municipio en diciembre de 2003, por la labor desarrollada en beneficio de la Villa y de las personas necesitadas. San Juan de Dios y otras muchas organizaciones supieron de esa labor; así como Teror donde dejará el recuerdo del Parque que a petición suya lleva el nombre de su suegro y de la casa de los Hernández, la histórica Casa del

 

Monumento ubicada en la Plaza del Pino reformada en 1887 y que tantos recuerdos guarda de la historia de la Villa

 

Maruca era de carácter fuerte, cercana a los necesitados y no entendía dar un paso atrás en nada. Era muy caritativa, solidaria, culta y de una humanidad cercana y sensible; creo que por los muchos dolores emocionales que había tenido que sufrir.

 

La última vez que hablamos me dijo que lo que más le agradecía a Dios era el haberle dado espaldas para aguantar los golpes de la vida y seguir adelante., y me recomendó que yo hiciera lo mismo.

 

Muere a poco de cumplir un siglo; como para decir “Llegué” a quiénes no la creían capaz.

 

Los encargados de cuidarla y mimarla (gracias a Fran de la Rosa, su sobrina Mely, a todos) se han preocupado de cumplir el único deseo que tenía para una vez llegara este momento. Ser velada en Teror y ser enterrada junto a su marido, que falleció el 28 de junio de 1981. Y así se hará.

 

¡Descansa en paz junto a los que querías y te querían, Maruca!

 

¡Te lo mereces!