El Cabildo de Gran Canaria abrió este lunes el tramo de la vía cerrado desde el pasado mes de noviembre al detectarse grietas.
Este lunes se ha abierto al tráfico el tramo de la GC-219 entre el Puente del Molino y la rotonda de Finca La Palma. La vía fue cerrada en noviembre del año pasado para poder acometer una actuación de emergencia en varios taludes que presentaban peligro de desprendimiento, el de más envergadura, situado en el punto kilométrico 1+850 a la altura de El Roque, afectaba también a varias viviendas.
El vicepresidente y consejero de Obras Públicas, Infraestructuras, Transporte y Movilidad del Cabildo de Gran Canaria, Miguel Ángel Pérez del Pino, ha visitado hoy la vía, acompañado del alcalde de Teror, Gonzalo Rosario, y los concejales de Vías y Obras, Sergio Nuez, y de Tráfico, Manuel Farías, antes de su reapertura para comprobar el resultado de las actuaciones que se han llevado a cabo en la GC-219, que conecta los barrios de Lo Blanco, Miraflor y El Hornillo y asume la mayor parte del tránsito de los camiones de la compañía Aguas de Teror.
“Con esta obra de emergencia hemos cumplido los objetivos que nos habíamos propuesto; mejorar la seguridad vial y la conectividad del municipio y de su principal industria: la empresa Aguas de Teror. Hemos trabajado en dos fases para asegurar el firme de la carretera y sanear el talud que presentaba riesgo de desprendimiento. Se han anclado dos sistemas laterales flexibles con mallas metálicas, se ha hecho un revestimiento con la técnica del gunitado (proyectar hormigón con una manguera a alta presión) y se ha pintado con pigmentos de una tonalidad que se mimetiza con el terreno natural“ ha explicado el vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria.
Por su parte, el alcalde de Teror transmitió su agradecimiento al consejero por el esfuerzo que se ha realizado desde el Cabildo para ejecutar esta obra en poco tiempo, garantizando la seguridad de la vía, y mejorando así las comunicaciones principalmente de los barrios de Miraflor, El Hornillo y Lo Blanco, así como para el tránsito de camiones pesados Aguas de Teror.
A su vez se ha acometido la estabilización de taludes en PK 2+250 mediante el desmonte de las partes inestables, saneando y posteriormente procediendo a la sujeción de zonas fracturadas con la ejecución de placas de hormigón armado anclados con bulones. Esta intervención de la Consejería de Obras Públicas, Infraestructuras, Transporte y Movilidad del Cabildo de Gran Canaria en la GC-219 ha tenido un coste de 450.000 euros y ha sido ejecutada por la empresa LOPESAN.
